Querida Kiantha: Cuando surjan celos, lidera con amabilidad

Querida Kiantha,

Me estoy encontrando objeto de celos en el lugar de trabajo y en algunas de mis nuevas amistades. Al principio, pensé que me lo estaba inventando. Después de acceder a múltiples instancias de esta dinámica, sé que no lo estoy imaginando. Simplemente no estoy segura de qué hacer al respecto.

Querida amiga,

Sé amable con las personas, incluso con las que están celosas de ti, pero no dejes que nadie juegue contigo en función de lo que sienten por sí mismos. Cuando los demás están celosos de ti, esa es su carga. Siempre debes ser tú misma, y a veces la plenitud de ti puede empujar contra las inseguridades de los demás.

Lo que parecen ser celos a menudo tiene menos que ver con el objeto de los celos y más con la incapacidad de una persona para ver o creer en la plenitud de sí misma.

Una vez trabajé en una organización en la que una colega mía se sentía muy intimidada por mí. Como mujer de color que suele ocupar un amplio espacio en las habitaciones en las que entro, siempre tengo en cuenta a los demás que pueden no sentirse tan cómodos con quiénes son y cómo son recibidos en el mundo.

Si bien no es mi responsabilidad manejar los sentimientos de los demás, sí es mi responsabilidad ser siempre amable. En mis intentos de ser amable, de vez en cuando me he encontrado haciéndome más pequeña para adaptarme a las necesidades. El camino más interesante es el que me invita a dejar de lado mis emociones y mi ego y utilizar los momentos en los que la envidia y los celos están presentes como oportunidades para invertir en y empoderar a los demás para que se muestren con su propio poder.

Al intentar navegar las interacciones entre tú y las personas que pueden estar celosas o envidiosas de ti, la única estrategia es concentrarse en la dinámica de la relación que te gustaría establecer. El objetivo debe ser desarrollar una conexión productiva en la que las personas con las que interactúas se sientan apoyadas y no amenazadas por ti. La envidia no existe en espacios donde abunda el apoyo.

Considera la posibilidad de estar abierta a ver a los demás a través de los lentes de sus vulnerabilidades. Recuerda, los sentimientos negativos que los demás tienen hacia ti en muchos casos ni siquiera se refieren a ti.

De alma a alma,

Kiantha